El relieve de Champagne
Paisajes formados por las manos de sus habitantes
Un viñedo esculpido por sus laderas
Además de su clima y su subsuelo, el relieve también es un punto clave para entender el terruño de Champagne.
La Champagne Vitícola es una región ondulada. El viñedo de Champagne es lo que se llama un “viñedo de laderas”: las vides están plantadas principalmente en las pendientes de las colinas. La inclinación media de estas pendientes es del 12%, pero algunas son muy pronunciadas y pueden llegar hasta el 59%... Esto puede hacer que el trabajo en los viñedos sea acrobático.
Este relieve es particularmente propicio para la elaboración del Champagne. Las faldas de las laderas ofrecen a cada vid
una exposición solar óptima. También permiten la escorrentía del agua de lluvia, facilitando así su circulación.
« Mi explotación está situada en Les Riceys, una región bastante ondulada. Cuando era pequeño, me gustaba caminar por allí con mi hermano. A medida que crecimos, aprendimos a lidiar con este terreno accidentado, que a veces complica nuestro trabajo y, al mismo tiempo, es fuente de muchas oportunidades. »
El relieve de Champagne
Cultura del Champagne
¿Cuál el origen de las colinas de Champagne?
Las laderas de Champagne se formaron hace varias decenas de millones de años, como consecuencia del hundimiento del centro de la Cuenca parisina, región geológica que cubre la mayor parte de la mitad norte de Francia. Como contrapartida, las partes norte y este de la Cuenca parisina se elevaron. La erosión modeló entonces poco a poco el relieve, hasta convertirlo en una sucesión de colinas que ondulan majestuosamente a través de la región.
¿Cuál el origen de las colinas de Champagne?
Las laderas de Champagne se formaron hace varias decenas de millones de años, como consecuencia del hundimiento del centro de la Cuenca parisina, región geológica que cubre la mayor parte de la mitad norte de Francia. Como contrapartida, las partes norte y este de la Cuenca parisina se elevaron. La erosión modeló entonces poco a poco el relieve, hasta convertirlo en una sucesión de colinas que ondulan majestuosamente a través de la región.
Bajo el sol, las vides
En cada etapa, la elaboración del Champagne es el resultado de una estrecha colaboración entre la naturaleza y el ser humano. La plantación de vides en Champagne obedece a esta regla.
Los viticultores han tratado de optimizar la insolación que permite la implantación en laderas: así pues, plantaron sus vides de forma que no perdieran ni un minuto de sol.
Por este motivo, si nos fijamos bien, observaremos que actualmente la mayoría de las laderas están plantadas según una orientación sur, sudeste y este. De este modo, se benefician de la máxima insolación durante todo el día, que calentará suavemente las cepas y hará que los racimos de uva alcancen una madurez perfecta, hasta el momento de la vendimia.
Cultura del Champagne
Las “Coteaux, Maisons et Caves de Champagne” (Laderas, Casas y Bodegas de Champagne) reconocidas en el Patrimonio Mundial de la UNESCO
El relieve de Champagne es a la vez hermoso y singular. Además de la influencia directa que tiene en el crecimiento de la vid y, por tanto, en la elaboración del Champagne, es un tesoro de nuestro patrimonio como tal. Por este motivo, desde 2015, las Laderas de Champagne, al igual que las Casas y Bodegas de Champagne, están reconocidas oficialmente en el Patrimonio Mundial de la UNESCO.
Las “Coteaux, Maisons et Caves de Champagne” (Laderas, Casas y Bodegas de Champagne) reconocidas en el Patrimonio Mundial de la UNESCO
El relieve de Champagne es a la vez hermoso y singular. Además de la influencia directa que tiene en el crecimiento de la vid y, por tanto, en la elaboración del Champagne, es un tesoro de nuestro patrimonio como tal. Por este motivo, desde 2015, las Laderas de Champagne, al igual que las Casas y Bodegas de Champagne, están reconocidas oficialmente en el Patrimonio Mundial de la UNESCO.